Las cadetes de Enrique Pereda y Pedro Castro realizaron una excelente actuación en tierras burgalesas en el primer partido preparatorio de la temporada para medirse al poderoso CD Castilla Sport. Con únicamente cinco sesiones en las piernas, infinidad de ausencias y combatiendo los rigores de las elevadas temperaturas estivales, nuestras chicas mostraron un orgullo pasista más grande que la mismísima catedral de Burgos. Gran trabajo equipo.
Con únicamente seis jugadoras de edad cadete (Elsa, Natalia, Raquel, Carla, Marina y Eva) y la sobresaliente colaboración de las infantiles Noive López y de Elena Benito (2005) -brillante y espléndida entre las mayores- conseguían imponerse en el primer cuarto. Poco a poco la escasez de componentes y el ritmo de las locales volteaba el electrónico (36-28 al descanso). Por si eran pocas las dificultades, la combativa Elsa Sanchez se lesionaba en una jugada fortuita limitando aún más la rotación cántabra.
Las valientes pupilas de Pedrito Castro mostraron una actitud extraordinaria durante los cuarenta minutos. Nunca se dieron por vencidas, un ORGULLO que estas chicas nos representen por todo el territorio nacional. Motivadas, comprometidas y reinando el compañerismo son síntomas inequívocos de GRAN EQUIPO.
Con el arrojo de la luchadora Natalia Romero, la defensa incansable de Raquel Gonzalez, la brillante verticalidad de Carla Lanza, los espectaculares triples de Eva Solórzano y la intensa elasticidad de Marina Fernández se conjugaron todos los ingredientes del coctel femenino pasista que deseamos. Independientemente del resultado, lucharon por cada balón y no escatimaron esfuerzos para hacer frente a sus adversarias. Enhorabuena chicas, este es el camino.
